De refranes y cantares tiene el pueblo mil millares. En este libro no hay tantos, pero es una selección extensa que pretende detallar el nacimiento y bautizo de cada modismo para asentarlo y clavarlo para siempre en la memoria del lector. Llegué a España sin nociones del idioma e incapaz de comunicarme con nadie. Me moría de curiosidad por conocer el mundo al otro lado de esa barrera del idioma y decidí franquearla como fuera. Los mamotretos de gramática me frustraban y los españoles con los que practicaba me escuchaban educadamente sin entender ni pío. Por suerte, un día encontré un viejo refranero y me di cuenta del acervo cultural que había en ello. Para uno que busca dominar una lengua extranjera, hablar con la boca prestada le sabe bien y no le cuesta nada. Así hice yo. Sin embargo, el refranero me enseñó bastante más que el idioma. En palabras del Quijote: Paréceme, Sancho, que no hay refrán que no sea verdadero, porque todos son sentencias sacadas de la misma experiencia, madre de las ciencias todas. Escribo este libro para los que se encuentran con el mismo grado de desesperación y perplejidad ante mi idioma que el que yo tuve ante el suyo. Espero que les sea de utilidad. Eso sí, los modismos darán empacho a quien pretenda engullirlos todos a la vez. Para digerirlos y asimilarlos, hay que dar tiempo al tiempo. Uno al día sería suficiente y por eso el libro tiene forma de calendario.