Un carpintero zapatista, un ladrón popular llamado Chucho, una prostituta jarocha de pelo rojo, un asesinato sin mesterio, un campesino obligado a salir de su pueblo, una portera sorda, dos polleros decidores, una vecina guapa y fantasiosa, una muerte trágica, un amor sin futuro, un regreso necesario al origen de todo...
Vidas comunes y corrientes que se cruzan en una vecindad de la ciudad de México. La vecindad se llama La Blanca.
Treinta años después de la edición original, Itaca publica una nueva versión corregida de la primera novela de Francisco Pérez Arce. La fuerza narrativa que después ha demostrado en otras novelas, como las de su trilogía Fin de siglo, ya estaba anunciada en La Blanca. La obra retrata la vida de un barrio chilango en los intensos años setenta.
Francisco Pérez Arce llegó a la Ciudad de México en 1965 para ingresar a la Preparatoria 1, que todavía estaba en el antiguo Colegio de San Ildefonso. Entró a la Escuela de Economía de la UNAM en 1968. Posteriormente fue profesor de esa universidad y de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, y desde 1978 es investigador en el INAH. Es autor de dos libros de ensayo y crónica: A muchas voces (1988) y 1994: El año que nos persigue (1995); y de tres novelas: La Blanca (1987), Dios nunca muere (1992) y El día de la virgen (1994), , Septiembre (2009), Xalostoc (2012) y Hotel Balmori (2014). En 1997, al ser elegido un gobierno democrático en la Ciudad de México, entró a la administración pública. En el 2001 volvió al trabajo académico y literario.
