Esta publicación es un recopilatorio de postales antiguas que caricaturizan el cuerpo de la mujer gorda dibujándolo como un ser absurdo o ridículo y motivo de mofa constante. Para Raquel, ilustradora y editora de profesión, recrearse con estos archivos tan descaradamente misóginos le permite entender ciertas estructuras o roles patriarcales que se siguen repitiendo hoy en día.