Ésta es una reimpresión del libro de Enoc, El profeta, un libro "perdido" que en 1773 descubrió en Abisinia (ahora Etiopía) el explorador escocés James Bruce.
Escrito en el segundo o primer siglo a.C. el Libro de Enoc fue una fuente de mucha influencia para los primeros pensadores judíos y cristianos, incluyendo los autores de muchos libros del Nuevo Testamento.