La Madonna de Sorata me gustó por varios motivos: la originalidad del tema, la seriedad de la investigación y la mezcla de estilos en los diferentes casos, desde el ensayo antropológico, al reportaje, al enfoque histórico, al cuento realístico-mágico. Eso lo hace más interesante aunque tal vez, alguien reproche cierta falta de unidad literaria. Las crónicas que más me han gustado han sido: El extraño caso del niño que se comió a su hermana, Mujeres de sol y, sobretodo, Los ojos de un minero enamorado, una tocante, aunque muy triste, auténtica historia de amor.