En el panorama de la poesía mexicana escrita por mujeres, Dana Gelinas sobresale por su capacidad para reflexionar -de una menera punzante y sin concesiones- sobre la vida y sus alrededores. Sus armas más potentes son, aunque parezca paradójico, la ironía y la ternura, con las cuales hace una crítica feroz de todo aquello que le rodea, dándole su justa dimensión humana a lo que, sin razón, solemos sacralizar.