Estamos en la cresta de cambios exponenciales en el orden politico, economico, tecnologico, social y migratorio. Se requiere de una verdadera voluntad politica para enfrentar racionalmente dichos cambios y encauzarlos hacia una solucion real, no ficticia y mucho menos narcisista y destructivo como lo pretende Donald Trump.
Es indispensable atacar problemas reales que persisten en la sociedad internacional que son la desigualdad, la impunidad, la corrupcion, la falta de respeto a los derechos humanos, la falta de rendicion de cuentas, la inseguridad, la inestabilidad, la falta del imperio de la ley, la degradacion de las normas sociales profundas. La fortaleza de los paises residira en realizar tareas pendientes y darse respetar y asi se les respetara en el exterior.