Centrado en el universo perecedero de la mansión Danielstown, El último septiembre es un relato de gran fuerza ambientado en la Guerra de independencia irlandesa. Los incendios y emboscadas se ven desde la distancia de una enorme casa, cuyos habitantes pasan horas felices entre tennis parties y bailes, sin mencionar los coqueteos con soldados ingleses acuartelados en la región. Pero tras los árboles, invadiendo poco a poco la desierta amplitud de la campiña, el estallido naranja del cielo asciende como un fuego imprevisible, presagio de una tragedia que culminará bajo la luz apacible y opulenta del otoño irlandés.
Bowen nació en Dublín. Su familia solía pasar los veranos en Bowens Court, una propiedad de la familia en el condado de Cork. Cuando su padre empezó a padecer de problemas mentales en 1907, Bowen y su madre se mudaron a Inglaterra, asentándose en Hythe (Kent). Tras la muerte de su madre en 1912, Bowen se fue a vivir con sus tías: la experiencia de orfandad estuvo muy presente en sus novelas.
Bowen fue educada en la Downe House School, bajo la dirección de Olive Willis. Después de pasar un tiempo en una escuela de arte en Londres, decidió dedicarse a escribir. Bowen se unió al Círculo de Bloomsbury, conociendo a Rose Macaulay, quien la ayudó a encontrar un editor para su primer libro, Encounters (1923).