XILITLA, EL JARDIN DE LAS DELICIAS DE EDWARD JAMES no se dirige al hombre en un solo aspecto; no llama a una sola persona, sino a todos los que deseen acercarse a conocer a este talentoso personaje que un dia encontro, en tierras mexicanas, el lugar soñado para su creacion. El espectador siempre quedará atónito ante este lenguaje que surge en el espacio adecuado y que muestra los símbolos y los ideales de James, quien a pesar de ser británico, ocupa un lugar importante en la historia del arte en México.
Edward james, el artista, el poeta, del cual poco se conoce en México, ha dejado una herencia invaluable, digna de contemplación profunda,