Los tiempos que vivimos nos llevan a un despertar de la consciencia. A fin de conseguirlo, hay que entrenarse mediante la observación del propio pensamiento, lo cual favorecerá momentos de reflexión e introspección.
La colección de mandalas concebidos por Claudette Jacques, de la cual éste es el número 16, nos ayuda a favorecer el despertar de la consciencia, pues el mandala es el lenguaje del alma. Cuanto más conscientes seamos, más mensajes recibiremos.