La idea de que la naturaleza no se descubre, sino se construye socialmente, es un concepto central dentro de la historia de la ciencia de las últimas décadas. En 1991 Donna Haraway publicó Simians, Cyborgs, and Women y se estableció como una de las escritoras feministas más reflexivas y desafiantes. Manifiesto para cyborgs. Ciencia, tecnología y feminismo socialista a finales del siglo xx -octavo capítulo de ese libro- es el intento "de construir un mito político fiel al feminismo, al socialismo y al materialismo". Para ello, Haraway indaga en discursos filosóficos, sociológicos, médicos y, fundamentalmente, literarios, en particular el de la ciencia ficción.