Este libro trata del sueño, del alma del amor, de la guerra. No se narra una historia ni se desenvuelven caracteres, tampoco fluye un monólogo interior.
Fernando, Adelaida y Emilio conversan, pero sin entablar diálogos escénicos. La prosa se ordena en una forma capital y resulta un poema.
Con un significado interno y subyacente se practica un nuevo sistema literario.
El título, "Muchacho solo", alude a un estado singular del espíritu en el mundo.